La acción de acercar hacia el propio cuerpo objetos que nos gustan, visto en el experimento de Chen y Bargh (citado arriba), podría coincidir con el concepto de valor sentimental que se deriva de la afectivadad colectiva, poniendo de manifiesto que aquellos objetos que percibimos cercanos, serán aquellos que nos gustan o tienen un valor sentimental mayor. Por otro lado, Colombetti (2020), habla de andamios afectivos, los cuales son objetos que pueden ayudar a regular nuestras emociones. Aunque es una limitada coincidencia, posteriores estudios podrían hacer más visibles las semejanzas y la importancia de estudiar la cognición corporizada (corporeizada) junto con los conceptos desarrollos por la afectividad colectiva. Comprender cómo la distancia y el valor que le damos a los objetos (andamios) junto con las acciones que emprendemos para aproximarnos a los objetos que nos gustan, puede estar relacionados con nuestras emociones y ser de especial interés para la cognición corporizada (corporeizada) afectiva.